Buddleia

17 de julio de 2010

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La noche de un burgués,
en el catre de madera;
gemidos a lágrima viva

de autocompasión rastrera.

Nevó y quemaste carbón,
para afeitarte en primavera;
sellando tu pérfido destino,
de la Rueda a la escalera.

Herido de muerte,
por obra de tus manos;
cultivando la esperanza
de un sueño abortado.

Y de espaldas orgulloso,
desafiando al Creador;
y con ociosa abulia:
canoso, usurero, pecador.